Marcos Paulo Mesquita Lopes llegó al Ramón Sánchez-Pizjuán en un intercambio con Ben Yedder. El portugués tiene un mes para demostrar que su futuro debe estar en el Sevilla FC
El mercado de fichajes trajo una sorpresa al Sevilla FC en agosto, cuando Rony Lopes se incorporó al primer equipo. El de Belém se convirtió en moneda de cambio con Ben Yedder, pero llegó en un nivel físico paupérrimo. Esto se traduce en pocos minutos en LaLiga (87) y algunos más en Europa League (410).
Con los nervionenses de vuelta al trabajo, se acerca un momento clave para el futuro del portugués, que quiere ser algo más que un futbolista de paso. En principio, Monchi le valoró como una apuesta de corto recorrido. No se confirmó públicamente, pero la intención es aprovecharle durante un tiempo y después buscar una venta.
La oportunidad de su vida pasa por algo más de un mes en el que tendrá 11 partidos por disputar. Con la opción de los cincos cambios aprobados por LaLiga, tal vez tenga más opciones. Betis, Levante, Barça, Villarreal, Valladolid, Leganés, Eibar, Athletic Club, Mallorca, Real Sociedad y Valencia serán sus adversarios.
Julen Lopetegui deberá estar muy hábil con las rotaciones, con tres partidos por semana se difumina la línea entre el once y el banquillo y cualquier esfuerzo es bienvenido, sobre todo si se traduce en goles y asistencias. De momento, Rony Lopes no ha estrenado sus estadísticas como sevillista en LaLiga, solo una asistencia en Europa y muchas dudas a pesar de cierta ilusión con su llegada.
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