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La televisión engaña mucho y hace que la gente parezca más musculosa y corpulenta de lo que en realidad es. Este es el caso con los futbolistas, que parece que tienen una masa muscular muy superior a cuando se les ve en persona, momento en el que uno se da cuente que están fibrosos, definidos y delgados.

Por ello la dieta de los futbolistas de élite de hoy en día está medida hasta el último ingrediente, para asegurar que se aprovecha hasta la última caloría para el esfuerzo físico que se va a realizar, pero a la vez sin pasarse de cantidad ya que esto puede repercutir negativamente en el rendimiento de los deportistas. Todos los equipos de primera y la mayoría de segunda cuentan en su equipo con especialistas en dietética que asesoran a jugadores y cuerpo técnico sobre que alimentación deben seguir los futbolistas para aumentar su rendimiento. Es destacable el caso del tenista Novak Djokovic, que tras someterse a una rigurosa dieta en la que redujo mucho el consumo de carbohidratos para sustituirlo por otras calorías, su juego despuntó hasta alcanzar sus mejores resultados y el puesto número 1 del ranking mundial.

De acuerdo con http://www.worldsportsfoodfight.com/es/ un jugador de fútbol corre una media de 10 km por partido, aunque algunos centro-campistas llegan a recorrer unos 14 km de media, y queman entre 1500 y 3000 calorías por partido dependiendo del tamaño del futbolista y de la posición en la que jueguen. Está claro que no quemará ni necesitará las mismas calorías Reyes que Krychowiak. A pesar del control de peso al que se ven sometidos los futbolistas de hoy en día, su consumo de calorías sigue siendo superior al de una persona media, en total ingieren unas 3800 calorías de media, 1,5 veces más de lo que debería consumir un ciudadano normal.

La dieta ideal de un futbolista con unas características normales consiste de 3 comidas completas que contienen alimentos de los más variados, y un aperitivo y una merienda que incluyen yogures, zumos de frutas y chocolate.

A pesar de ello y como se puede comprobar en la página de http://www.worldsportsfoodfight.com/es/ las calorías que ha de ingerir un futbolista no son nada comparadas a las que toman jugadores de rugby o fútbol americano, que pueden llegar a la friolera de 6000, casi 2,5 veces más de lo que come un ciudadano cualquiera.

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